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Novela negra.
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31-Noviembre-2022

Además de estar protagonizadas por el famoso detective privado Hércules Poirot y ambientadas en Oriente Medio, tres de las novelas más destacadas de Agatha Christie (1890-1976) exponen la fascinación de la dama del crimen por la arqueología. En Asesinato en Mesopotamia (1936), la trama transcurre durante las excavaciones en el yacimiento de Ur, en Irak; en las ruinas de Petra se desarrolla gran parte del suspense de Cita con la muerte (1938); y entremedias, para Muerte en el Nilo (1937), la escritora británica ingenió un villano disfrazado de arqueólogo, el signor Richetti. Todas estas ficciones de Christie, tríada a la que cabría sumar Intriga en Bagdad (1951), bebieron de un sustrato real, de su propia experiencia sobre el terreno. Durante su visita a Bagdad en 1930, la ya reputada autora conoció a Leonard y Katherine Woolley, que llevaban varias campañas de excavaciones en la ciudad sumeria de Ur. El matrimonio la invitó a hospedarse con ellos y a descubrir el sitio, y lo que en realidad conoció fue a su nuevo marido, el arqueólogo Max Mallowan, que la acompañaría en su viaje de regreso a Inglaterra. Tanto intimaron y tan bien lo pasaron que a finales de año ya se habían dado el sí quiero.

La pasión compartida de ambos por investigar las evidencias físicas de civilizaciones remotas les empujaría a emprender una serie de prospecciones en diversos lugares de Siria e Irak. Desde el primer momento, Christie olvidó su fama y se involucró en los trabajos de Mallowan —en una ocasión diría que "un arqueólogo es el mejor marido posible para una mujer: cuanto más vieja te hagas, más encantadora te encontrará"—. Como una suerte de ayudante, durmió en las improvisadas tiendas, limpió y restauró las piezas halladas y se dedicó a registrarlas mediante fotografías e inventarios. También contribuyó económicamente a fundar la Escuela Británica de Arqueología, hoy conocida como Instituto Británico para el Estudio de Irak.

Agatha Christie en Egipto en 1931, durante su luna de miel.

Aparte de la evidente influencia en sus novelas, la autora de Asesinato en el Orient Express (1934) publicó en los últimos compases de la II Guerra Mundial un libro sobre sus viajes arqueológicos en Oriente Medio. Titulado Ven y dime cómo vives y reeditado ahora en español por Tusquets, Christie definió esta obra, probablemente la más ignorada de su cosecha, como "un entretenimiento…, un librillo lleno de acontecimientos cotidianos", una "crónica intrascendente" —también dice, sin embargo, que "escribir estas sencillas notas no ha sido una tarea, sino un parto de amor"— que nació como respuesta al interés de la gente por su participación en las excavaciones en Siria y que "no aportará consideraciones interesantes sobre la arqueología".

Puede que tuviese razón: el lector no va a encontrar en estas páginas una detallada relación sobre el transcurso de los trabajos en tells o yacimientos, como Chagar Bazar, y algunos de sus objetivos, por ejemplo, recabar información sobre la dinastía militar de Mitanni, una casta dominante de guerreros que se vinculó con el Antiguo Egipto a través de matrimonios reales. Pero la cadencia literaria de Christie convierte esta obra en un relato de aventuras sobre su vida diaria entre mujeres kurdas, jeques que se asemejan a Enrique VIII y taxistas armenios, en una novelesca crónica etnográfica de la región, cruzada junto a sus compañeros de expedición a bordo del Queen Mary, un camión cargado de verduras y montones de huevos que subieron a un transbordador para cruzar el río Éufrates.

El Queen Mary por el futuro centro del mundo.

Más que una crónica arqueológica, Ven y dime cómo vives es una crónica de viajes armada con mucho humor —"una de las calamidades de estar casada con un arqueólogo es su experto conocimiento para interpretar los diseños más inofensivos", escribe Christie sobre un vestido lleno de motivos referentes a la fertilidad según el ojo de Max— y con hermosas postales que evidencian el hechizo de la escritora por el patrimonio histórico. Sobre la ciudad desértica de Palmira, dice: "Su encanto reside en su esbelta belleza cremosa elevándose de un modo fantástico en medio de arenas calientes. Es deliciosa, impresionante e increíble, como la teatral alucinación de un sueño. Cortes, templos y columnas en ruinas…". La reina de la novela de misterio esbozó una suerte de diario de campaña pero sin las especificidades científicas, como tratando de restar importancia a su desempeño práctico. Describe el trayecto desde Calais hasta Estambul en el Orient Express, un pícnic con su esposo en el cráter de un volcán, débiles episodios de salud provocados por la "tripa del soldado egipcio" y las pulgas o, quizá lo más interesante, ese choque de culturas del periodo de entreguerras entre los burgueses británicos que mataban los ratos muertos con una taza de té en la manos y sus ayudantes árabes.

El Orient Express fue el nombre del servicio de tren de larga distancia que, en su mayor trayecto, cubría la ruta París-Estambul. Desde su inauguración en 1883 hasta 2009, su ruta fue cambiada en diversas ocasiones, ya sea por razones logísticas o problemas políticos.

No se leen conclusiones sobre los resultados generales alcanzados porque no es lo interesante, sino la experiencia, el paisaje, las relaciones humanas. Aunque una de las confesiones que más llaman la atención es el desprecio por los restos de los "modernos" romanos, "niños de ayer" en comparación con los pueblos antiguos que perseguían. En un pasaje que hoy no sería visto con buenos ojos, Christie y Mallowan se retratan tirando fragmentos de cerámica del periodo romano.

Las cinco campañas de excavaciones dirigidas por el matrimonio se cerraron con un capítulo "de baja traición y codicia", un accidente mortal de cuatro hombres de una cuadrilla que quedaron sepultados buscando de forma furtiva hallazgos en Tell Brak. Christie recrea el suceso con las dosis de misterio que desbordan sus novelas. Irak y Siria fueron un marcador geográfico y temático de la mejor literatura de la dama del crimen.

La reina de la novela de misterio recogió su exótica experiencia restaurando y clasificando hallazgos en Oriente Medio en 'Ven y dime cómo vives', reeditado ahora por Tusquets. Casada con el prestigioso arqueólogo británico Max Mallowan, Agatha Christie tuvo la oportunidad de recorrer, en los años treinta del pasado siglo, todo Oriente Medio acompañando a su esposo en diversas campañas de excavaciones arqueológicas en Siria e Irak. Como dice la propia autora, esta obra es la respuesta a las innumerables preguntas que sus amistades y conocidos le hacían acerca del tipo de vida que el matrimonio llevaba en esos extraños parajes. Las peripecias y dificultades que este grupo de occidentales afronta estoicamente, al tiempo que la enriquecedora convivencia con los nativos, son narradas por la gran escritora con toda la agudeza propia de la hipercivilizada Gran Bretaña. Glamour, aventuras en escenarios exóticos —que esta autora incorporó en algunas de sus más célebres novelas—, ingentes cantidades de té e insuperable humor inglés se conjugan en este inolvidable fresco del mundo de entreguerras.

15-Abril-2023

Jussi Adler Olsen, el danés más salado de la novela policiaca europea. En “Cloruro de sodio” (Maeva) vuelve a adentrarnos en el complicado día a día de esa división Q de la policía danesa que apechuga con los casos más vidriosos. En esta ocasión, la mezcla de azar y observación los hace ponerse tras los pasos de uno de los criminales más crueles y astutos a los que se han enfrentado.

Es de noche y en el puerto de Barcelona un guardia hace su ronda cuando su pastora alemana se para en seco a olfatear desesperadamente un contenedor. Al llegar, los mossos d’esquadra hallan en su interior a una mujer en posición fetal, inconsciente y deshidratada. Tiene una brecha en la sien, quemaduras en la cara y el cuerpo, y no recuerda quién es ni cuál es su lengua materna, pero está viva. Mientras se recupera enel Hospital Clínic, un hombre intenta asesinarla. La inspectora Anna Ripoll, experta en trata de mujeres, parece haber dado con su identidad y su dirección: Alicia Garone; 19, rue du Chariot, Lyon. En la ciudad francesa el inspector Erik Zapori busca el modo de librarse de la investigación a la que asuntos internos lo está sometiendo por delitos de corrupción y proxenetismo. Nada mejor que viajar a España a ayudar en la resolución de un caso, aunque puede que este sea el más complejo de su vida.

Rosa Montero, una de las autoras más queridas y premiadas en lengua española, vuelve a la novela negra, esta vez acompañada por Olivier Truc, ganador del Premio Quais du Polar, el más prestigioso galardón francés del género policiaco.

27-Septiembre-2023

Alfred Edward Woodley Mason pudo protagonizar alguna de las novelas que escribió. Durante la I Guerra Mundial, cuando era un escritor y dramaturgo de éxito de casi 50 años, decidió enrolarse y servir en el Regimiento de Manchester como oficial de infantería, aunque luego fue enviado a España como agente encubierto para el recién formado Servicio Secreto británico. Navegaba en su yate por la costa española, como si fuese un millonario de vacaciones, mientras creaba una red de espías que controlaba al enemigo tanto por tierra como por mar. Entre sus colaboradores estaba Hugh Pakenham Borthwick, un inglés que habitó durante esos años un islote abandonado frente a la costa de Águilas (Murcia) e informaba de los barcos alemanes y neutrales que se abastecían del hierro extraído de minas cercanas y que eran objetivo principal de los submarinos. Ese espíritu inquieto de Mason está plasmado en su libro más famoso, 'Las cuatro plumas', una obra sobre la cobardía, el valor y la redención que ha sido llevada al cine en multitud de versiones. Un año antes de su publicación en 1902, el escritor recorrió Sudán lo que le permitió reflejar fielmente muchos de los escenarios de la novela.

Nacido en 1865 en Camberwell, se había curtido como actor en escenarios por Inglaterra antes de asentarse en Londres e iniciar su carrera de escritor, por lo que sabía muy bien dar al público lo que quería, como aventuras en escenarios exóticos y personajes que se debaten entre la moral y la pasión. Fue uno de los autores más aclamados en su momento, si bien quedó en el olvidó tras su muerte en 1948. Para rescatar su memoria y llevar a las nuevas generaciones sus obras, la editorial Renacimiento ha empezado a editar las novelas de detectives de Mason, de las que también fue un precursor en contraposición a su contemporáneo Arthur Conan Doyle, el creador de Sherlock Holmes. También sirvieron de inspiración a Agatha Christie para el personaje de Hércules Poirot. Tras un breve paso en el Parlamento como diputado liberal por Coventry, Mason publicó en 1910 'El misterio de la Villa Rosa' en la que hizo debutar al inspector Gabriel Hanaud de la Sûreté francesa para investigar varios asesinatos y robos de joyas producidos en Aix-les-Bains, una localidad turística de la costa de Francia. La novela está considerada por la crítica especializada como la primera obra policiaca moderna, ya que el investigador es un policía que no sólo usa la lógica y el raciocinio -como hacía Holmes- para resolver los misterios planteados sino que además de las evidencias y pistas se deja llevar por la intuición y el conocimiento de la moral y el comportamiento humano, elementos que luego desarrollaría el personaje de Poirot en sus novelas.

Pese a ser contemporáneos y compartir una sociedad gastronómica, llamada Crimes Club, formada por escritores, abogados, académicos y policías con fascinación por la mente criminal, Conan Doyle y Mason crearon dos personajes antagónicos que triunfaron entre el público de inicios del siglo XX aunque en la memoria colectiva sólo sobrevivió Holmes.

Eran hasta física y emocionalmente antagónicos. Mientras que Sherlock era delgado, detective aficionado y sin habilidad social, el inspector Gabriel Hanaud era corpulento, policía profesional y trabajaba en Francia. Además, se jacta en las novelas de disfrutar de placeres mundanos como la buena comida o la cercanía de la compañía femenina.

Junto con al análisis de las pruebas, el policía francés también desarrolla sus conocimientos psicológicos para esclarecer crímenes, una tendencia que luego ampliarían otros detectives de ficción más modernos. En este sentido, Mason fue un precursor al dotar de una inteligencia emocional a su personaje para aplicarla en los casos que resuelve. La rivalidad con Sherlock Holmes también está presente en el debut de Hanaud. En su primera aparición literaria ridiculiza el espiritismo y los médiums, por los que Conan Doyle sentía auténtica devoción. La única similitud, junto con atrapar al culpable, es que los dos tienen un ayudante que narra sus peripecias: el Watson de Hanaud es un banquero londinense retirado llamado Julius Ricardo. El primer libro de Hanaud fue un éxito de ventas y por eso Mason escribió cuatro más, junto con varios cuentos, protagonizados por este personaje. Tras El misterio de la Villa Rosa, la editorial Renacimiento publica ahora La casa de la flecha, la segunda novela protagonizada por este inspector y que se traduce por primera vez al castellano. En esta ocasión, el detective investiga una acusación de asesinato en Dijon por parte de un chantajista mientras indaga varias muertes provocadas tras recibir cartas anónimas. La última obra en la que sale Hanaud fue The House in Lordship Lane, que apareció en 1946 y que, a diferencia de las demás de la serie, se desarrolla en gran medida en Inglaterra. Como era previsible, y como pasó con Las cuatro plumas y otras obras de Mason, las novelas protagonizadas por Hanaud se adaptaron a otros medios para que el público las disfrutase. Incluso en 1920 coincidieron en cartelera una versión de El misterio de la Casa Rosa en cine y otra en teatro con gran éxito de público.

Escena de la última versión de 'Las 4 plumas'.

Como curiosidad, la primera versión sonora de El misterio de la Villa Rosa se rodó tanto en inglés como en francés en 1930 y fue el debut cinematográfico de Austin Trevor, como señor Ricardo. Este actor se convertiría años después en el primero en interpretar a Hércules Poirot en la pantalla.

24-Noviembre-2023

¿Viajamos en el tiempo?

Hasta 2014.

Moussa Konaté afirmó que “la intriga policial era un pretexto”, que lo importante era mostrar diferentes puntos de vista de la realidad maliense. Abasse Ndione opinaba que “lo que en Europa se califica de novela negra en África es ‘literatura’ ” o que “Senegal no es una sociedad apacible. Lejos de las imágenes folklóricas, es una sociedad violenta acerca de la cual no hay mucho que inventar para escribir una novela negra”.Y por último, el sudafricano James McClure, un maestro a la hora de tratar el lado más oscuro del ser humano, comentaba en una entrevista: «el crimen te dice mucho acerca de una sociedad”. En aquel año, nuevas oportunidades se abrieron con la creación de editoriales sobre el género negro. La Editorial Cordite de la mano del escritor Helon Habila y de Parrésia Publishers, querían editar novelas sobre crimen desde África. Cordite (que, según Habila, significa un tipo de pólvora sin humo con un olor bastante distinto al habitual) buscaba manuscritos de escritores africanos, quienes debían no sólo ser ciudadanos de un país africano, sino también residir allí como condición para poder ser editados. Les animaba el deseo de reactivar el mercado literario y popularizar un género, dentro del propio continente, poco frecuentado hasta entonces.

Cartel promocional de Cordite Books.

Achille F. Ngoye (Zaire-actual RD Congo, 1944) inauguró el género policíaco en 1996 con su novela Agence Black Bafoussa publicada en la Serie Noir de la Editorial Gallimard (Francia), abriendo la puerta a la penetración en el continente africano “a un género jamás cultivado allí y considerado superfluo” (Landry-Wilfrid Mampika). Después, otros como Aïda Mady Diallo, Theo Ananissoh, Baenga Bolya, Henri Lopes o, Abasse Ndione han escrito thrillers o novelas negras. Alexander McCall Smith, el escocés nacido en Zimbaue, alumbró a Precious Ramotswe, la primera detective de Botswana y, desde la África francófona, el gabonés Janis Otsiemi cultiva una narrativa que discurre por el camino de lo que él llama “miserabilismo” (un reflejo de la vida marginal).

En fechas más recientes, el keniata Mukoma wa Ngugi con Black Star Nairobi, la suazilandesa Malla Nun con Que los muertos descansen en paz, la zimbabuesa Jassy Mackenzie con Pale Horses, Kwei Quartey con Murder at Cape Three Points o la apuesta de Lauren Beukes con Las luminosas, nos confirman que el género sigue interesando y mucho. Las obras publicadas son una forma como otra cualquiera de conocer unas cuantas novelas de un género que hace tiempo dejó de ser menor, para ofrecernos, a través de sus tramas, una disección de las sociedades por las que transcurren y un espejo eficaz de las relaciones de poder, sociales y económicas, al tiempo que ponen la luz sobre realidades como los niños de la calle, la actuación de las multinacionales en el agro africano o la segregación racial, por citar algunas de ellas. Afirmaba Nicole Canto, directora de la ya desaparecida Editorial granadina Zoela que “leer una buena novela negra de un escritor africano es entrar directamente en África”. ¿Lo probamos?.

Una chica que debería estar muerta y un asesino en serie que viaja por el tiempo. Lauren Beukes crea, en un Chicago que va de adelante hacia atrás, una novela trepidante, en la que dibuja la persecución de una víctima, Kirby, tras los pasos del que intentó asesinarla, Harper, obsesionado con las jovencitas (a las que él llama “luminosas”). Persiguiéndolas desde su infancia, en la que les regala diversos objetos que ellas conservarán el resto de su vida, saltando por el espacio y el tiempo, hasta el momento en el que las mata. Las luminosas es una novela inteligente y muy bien documentada, que forma parte de esa África que escribe también con otros decorados y temáticas más universales, y que incide en la personalidad de sus protagonistas. Sobre todo en la de Kirby, la luminosa no atrapada, una mujer con una gran determinación y sentido del humor… negro.

Cuando la desesperación acucia sólo queda la brujería, que un hechizo funcione. El comisario Habib,una creación del maliense Moussa Konaté, es un policía con aires de intelectual, alto y delgado, de aspecto frágil. Concibe su trabajo como un deber y es consciente de que nunca tendrá un final. Habib sabe que detrás de los índices de criminalidad hay múltiples factores, como le hace saber a su joven e inexperto acompañante, el inspector Sosso. El asesino de Banconi, ambientada en un distrito pobre y marginal de la ciudad de Bamako, salpicado de chabolas y de supersticiones, magia y religión, comienza con un cadáver encontrado en las letrinas, al que seguirán otras dos muertes más. Si no se remedia la Policía Política aplicará sus propios métodos para endosar las muertes al oportuno cabeza de turco, Habib y Sosso cuentan con un plazo de 72 horas para resolver los casos.

Hay muchas formas de hablar del apartheid. James McClure nos enseña que también es posible hacerlo a través de la novela negra y de manera excelente en La canción del perro, protagonizada por esa peculiar pareja dedetectives Kramer&Zondi o Zondi&Kramer. Dentro de un coche de policía, el único lugar en el que un blanco y un negro pueden estar juntos en Sudáfrica, el blanco desaliñado, un tanto solitario, malhumorado y en apariencia racista, y el negro elegante, inteligente, rápido y camaleónico, que sabe sacar la mejor ventaja de cada situación, alejados de estereotipos o clichés, nos enseñan una Sudáfrica racista y clasista, en la que tendrán que resolver varios asesinatos, mientras se van conociendo. La palabra “cafre” resuena en la obra de manera estremecedora, demostrando que el lenguaje puede ser tan hiriente como el golpe más certero.

Darko Dawson, el detective creado por el ghanés afincado en EEUU, Kwei Quartey, rompe el estereotipo que suele acompañar a estas creaciones, mostrando un esposo fiel y padre cariñoso, aficionado a los refrescos y a la marihuana. Aunque desprecia los tratos de favor y “entretenerse” en otros campos alejados de la pura investigación policial, da el tipo por su intento de no ser absorbido por el sistema. Hasta el momento ya ha protagonizado tres historias. En la segunda, Children of the street, se enfrenta a una cadena de asesinatos de niños de la calle que supone el caso más inquietante y escalofriante de su carrera. Ambientada en los barrios pobres de Accra, en una Ghana en rápido crecimiento y cosmopolita, la novela nos adentra en las duras vidas de estos niños y su brutal entorno vital, en una historia en la que el detective tendrá que averiguar si se trata de las víctimas de un monstruo solitario o son fruto de uno de esos aislados asesinatos rituales, que de vez en cuando golpean a la ciudad.

La vida en espiral gira sobre la vida de unos jóvenes senegaleses aislados en Sambay, un pueblo cercano a Dakar, y dedicados la mayor parte del tiempo a fumar yamba (nombre local del cannabis). Tras varias semanas sin cannabis, Amuyaakar Ndooy, el protagonista, decide convertirse en un sipikat (traficante de cannabis), dando un doble carpetazo, tanto a sus necesidades en relación con la yamba, como a sus problemas laborales. Se iniciará así una vida en espiral que le irá internando en diversas esferas, en las que se introduce con toda naturalidad, y que suponen un conocimiento de la implicación en el consumo y tráfico de todas las clases poderosas senegalesas. Abasse Ndione, su autor, no propone ningún juicio, su protagonista no se arrepiente ni piensa en dejar el consumo de yamba, al contrario, elogia sus efectos y los busca.

La venganza, dicen, es un plato que se sirve frío. Y de eso sabe un rato Kuty, la protagonista de la novela de Aïda Diallo, Kuty, memoria de sangre. El padre de Kuty es negro, peul y su madre blanca, tuareg. Estamos en 1984 y lo que la pequeña Kuty de diez años presenciará la marcará para el resto de su vida. Una banda de saqueadores tuaregs masacra, viola y asesina a la familia de Kuty. La niña crece con un anhelo principal: vengar a su familia. Convertida en una hermosísima e inteligente joven, va creciendo mientras planea, con una frialdad asombrosa, sin pizca de remordimiento, cada una de sus venganzas. A veces maquiavélica, a veces una niña herida de manera devastadora e irremediable, es difícil no sentir simpatía por Kuty y, al tiempo, no sentirse horrorizada por sus actos.

En la cuarta entrega de la serie protagonizada por Jade de Jong, la atípica detective sudafricana, tan dura y pendenciera como cualquier homológo masculino, se enfrenta a la política, las finanzas y la operación de las multinacionales del agronegocio. El comienzo de Pale Horses parece ser fruto de un mero contratiempo. La muerte de Sonet, un fatal salto de paracaidismo, se intenta mostrar como un accidente, pero Jade de Jong pronto comienza a sospechar que detrás hay algo más. Así, desplazándose desde la urbana Johannesburgo a la rural Limpopo, descubrirá que Sonet había estado trabajando para una organización que ayudaba a las comunidades más empobrecidas, logrando que fueran autosuficientes, mediante técnicas agrícolas. De Jong, a quien su creadora, la escritora sudafricana Jassy Mackenzie, describe como hostil y violenta en la superficie, pero muy atractiva, acogedora e, incluso, vulnerable, es un poco como la propia ciudad de Johannesburgo; donde la regla es no respetar la ley.

Lazare Mayele es un atractivo mestizo, con un gran poder de seducción, que se presenta voluntario en la revista en la que trabaja para realizar un reportaje sobre los últimos acontecimientos políticos en la África francófona. En Caso cerrado regresa a Mossika, un país que no figura en ningún atlas. Sin embargo, el país existe, pertenece a mi África interior, nos aclara el protagonista, el lugar del que huyó cuando tenía seis años tras el asesinato de su padre Bossuet Mayélé, del que no guarda ya ningún recuerdo. Su retorno no será únicamente una vuelta para realizar un trabajo, pretende enfrentarse a un continente que reivindica y le da miedo a partes iguales, pretende encontrar al asesino de su padre… y, en último término o quizás en primero, a si mismo. Henri Lopes, mediante una original trama detectivesca, nos sumerge en uno de los temas más frecuentados en la actualidad literaria que proviene de este continente: la de la identidad de la diáspora.

Al principio fue Morituri, una novela firmada por una misteriosa escritora argelina, Yasmina Khadra, cuyo nombre no tardaría en resonar como una deflagración en el paisaje literario europeo. Nacía un personaje: el tierno e incorruptible comisario Llob, escritor de novelas policíacas en sus ratos perdidos, con 58 años y su lucidez a toda prueba. Dispuesto a todo para acabar con los depredadores integristas que asolan su país y desvelar sus conexiones con la mafia político-financiera. Con peligro de ser considerado «hombre muerto» por unos y otros. Entregando su implacable radiografía de una tragedia vivida a escasas brazas de Europa, mientras el mundo contempla el advenimiento de una plaga que se propaga como un virus letal. Elogiado unánimemente por la crítica y convertido en un clásico de la novela internacional, el tríptico del comisario Llob —Morituri, Doble Blanco y El Otoño de las Quimeras—, se reúne aquí por primera vez en un solo volumen, con el título de Trilogía de Argel.

¿Nos vamos a Japón?

Pese a que en los países de habla hispana, la novela policíaca japonesa apenas se conoce ni se ha traducido, este género goza de una inmensa popularidad en el país nipón. En Japón el género policíaco se engloba dentro de la literatura denominada “popular” y tiene diversas variantes o subgéneros perfectamente delimitados. Algunos de los más importantes son: Nazotoki: puede considerarse similar a la novela policíaca británica clásica (la trama se plantea como un juego de lógica donde el policía o detective protagonista utiliza el razonamiento deductivo para descubrir al culpable). Mado koirudo: la trama no se plantea como un juego de pistas, sino que tiene más elementos de acción y aventura. Shyakai ha: la trama relata conflictos relacionados con las distintas clases sociales que existen en Japón. Seishyun mono: se trata de una rama dedicada al público joven o adolescente. La acción suele tener lugar en colegios o universidades. Existen además otras variantes, como la novela policíaca histórica, de humor, o la de viajes.

Dentro del honkaku, Edogawa Rampo es el primer escritor japonés de misterio moderno y el fundador del Detective Story Club en Japón. Rampo era un admirador de los escritores de misterio occidentales. Obtuvo su fama a principios de la década de 1920, cuando comenzó a aportar al género muchos elementos extraños, eróticos e incluso fantásticos. Esto se debe en parte a la tensión social anterior a la Segunda Guerra Mundial. Las novelas de misterio de Rampo generalmente siguieron fórmulas convencionales y han sido clasificadas como parte del honkaku ha, llamada "escuela ortodoxa", o ficción detectivesca "estándar", o " "auténtica" ficción policial. En 1957, Seicho Matsumoto recibió el Premio de Escritores de Misterio de Japón por su cuento The Face. Los trabajos posteriores de The Face y Matsumoto iniciaron la "escuela social" dentro del género, que enfatizaba el realismo social , describía crímenes en un entorno ordinario y fijaba los motivos dentro de un contexto más amplio de injusticia social y corrupción política. Desde la década de 1980, ha surgido una "nueva escuela ortodoxa". Exige la restauración de las reglas clásicas de la ficción policial y el uso de elementos más autorreflexivos, inspirados en gran medida en las obras de Ellery Queen y John Dickson Carr. Entre los autores famosos de este movimiento se encuentran Soji Shimada, Yukito Ayatsuji, Rintaro Norizuki, Alice Arisugawa, Kaoru Kitamura y Taku Ashibe.

Edogawa Rampo (1894-1965): pesudónimo de Hirai Taro, es el autor pionero del género, fuertemente influido por autores clásicos de Occidente como Arthur Conan Doyle o Edgar Allan Poe (el pseudónimo con que firmaba sus obras es, de hecho la versión japonesa del nombre del autor norteamericano). Fue, además, el fundador de la Asociación Japonesa de Escritores de Misterio.

Kido Okamoto (1872-1939): es considerado por algunos el equivalente japonés a Arthur Conan Doyle y uno de los creadores del género en su país con su personaje Hanshichi y los diferentes misterios a que se enfrenta en el Japón de mediados del siglo XIX, durante la llamada “era Edo”, correspondiente con el último shogunato.

Desde su aparición en varias entregas, las aventuras de este detective de la época feudal, conocido como el Sherlock Holmes nipón, han deleitado a muchas generaciones de japoneses. El nombre de Hanshichi, que se escribe en japonés con dos signos y con un total de siete trazos, permanecerá siempre como uno de los más famosos dentro de la literatura popular japonesa, precursor del género policial histórico y representante pionero del detective moderno, sin haber perdido aún ese aroma todavía feudal en sus aventuras.

Seicho Matsumoto (1909 - 1992): es reconocido principalmente por haber revitalizado el género de la novela policíaca a partir de la década de los cincuenta del pasado siglo. Como en la novela hard boiled norteamericana, Seicho Matsumoto ofrece un panorama de una sociedad corrupta en un ambiente oscuro y decadente. Extraordinariamente prolífico, llegó a escribir más de 400 novelas a lo largo de su vida.

Futaro Yamada (1922 - 2001): conocido tanto por sus novelas detectivescas como por sus aventuras de ninjas, muchas de ellas llevadas posteriormente al cine o adaptadas en forma de manga o anime, Futaro Yamada abandonó los estudios de medicina para dedicarse a la ficción detectivesca. Ha sido uno de los autores más populares de relato de misterio de Japón.

Shinichi Hoshi (1926 - 1997): pese a ser conocido principalmente por sus relatos breves e incluso microrrelatos de ciencia ficción, también es autor de historias de intriga, misterio y terror. Ha sido traducido a un buen número de idiomas y es considerado uno de los principales autores de relatos de los años posteriores a la Segunda Guerra Mundial.

Kyotaro Nishimura (1930- ): destaca principalmente por su serie de novelas de misterio ambientadas en trenes, tales como El tren del misterio desaparece. Algunas de sus novelas han sido adaptadas en forma de videojuegos.

Jiro Akagawa (1948-): es famoso sobre todo por la obra Mike neko Homuzu no suiri y por sus novelas de humor policíacas como Yurei ressha (El tren fantasma). Asimismo, algunos de sus otros trabajos como Voz celestial han sido adaptados al cine de animación japonés (anime). Es también un autor extraordinariamente prolífico, con sagas muy interesantes.

Soji Shimada (1948- ): es un famoso autornde novelas policíacas "de lógica". Fue conductor de camiones y músico antes de dedicarse a escribir. Debutó como novelista de misterio con la obra Senseijutsu Satsujinjiken (“Los asesinos del zodiaco de Tokio”), obra que quedó finalista para el premio Rampo Edogawa. Es conocido también por una serie de novelas protagonizadas por el detective Mitarai y otra por el detective Yoshiki. En sus novelas suele tratar temas como la pena de muerte y la cultura japonesa. Sin embargo, también cultiva el género policíaco humorístico con títulos como Soseki y los asesinatos de la momia de Londres, donde retrata a un Sherlock Holmes esquizofrénico.

Natsuo Kirino (1951 - ): es una de las autoras más destacadas del boom de la novela policíaca japonesa y ha ganado importantes premios literarios. Su obra más famosa, Out, ha sido traducida al castellano y está editada por Planeta. También ha sido adaptada al cine y la productora New Line Cinema ha comprado los derechos para hacer una versión norteamericana de la misma.

Sujata Massey (1964- ): autora británica de ascendencia japonesa, y emigrada a los Estados Unidos a la edad de 5 años. Es famosa sobre todo por su serie de novelas protagonizadas por el detective Rei Shimura. Muchas de esas novelas están ambientadas en Japón y en Washington D.C.

Hase Seishu (1965- ): famoso novelista conocido sobre todo por su serie de novelas sobre la yakuza (crimen organizado japonés). Algunas de sus obras han sido adaptadas al cine.

Miyuki Miyabe (1960- ) es una escritora japonesa, conocida especialmente por sus novelas policiacas. Superventas en su país, según datos de 2007 llevaba más de 40 millones de ejemplares vendidos. Para 2012 había publicado 46 novelas, 15 de las cuales han sido llevadas al cine. Ha recibido prestigiosos premios y sus obras han sido traducidas a numerosos idiomas. En España, la editorial Quaterni ha publicado la Tetralogía de Tokio, compuesta por El susurro del diablo, Fuego Cruzado, La sombra de Kasha y RPG. Juego de rol, todas ellas traducidas por Purificación Meseguer.

Con Quaterni también tenemos Creepy de Yutaka Maekawa.

Masako Togawa nació en Tokio (Japón). Desde muy pequeña, trabajó como cantante en cabarés consiguiendo una fama moderada. Sin embargo, su lanzamiento público se debió como novelista. En 1962 publicó La llave maestra (Oinaru gen'ei) con la que obtuvo el prestigioso premio japonés de novela negra Edogawa Rampo. Sus dos siguientes novelas se convirtieron en superventas mundiales: Lady Killer (Ryojin nikki 1963) y Un beso de fuego (Hi no seppun, 1985). Su carrera como actriz se basó en las adaptaciones televisivas que se hicieron de sus novelas policíacas. Además, fue actriz y guionista de la serie Playgirl de 1969 a 1974.

Natsuhiko Kyogoku es miembro de Mystery Writers of Japan y del Honkaku Mystery Writers Club of Japan. Tres de sus novelas se han convertido en largometrajes; Moryo no Hako, que ganó el premio Mystery Writers of Japan de 1996, también se convirtió en una serie de televisión de anime, al igual que Kosetsu Hyaku Monogatari, y su libro Loups=Garous se adaptó a una película de anime. Vertical ha publicado su primera novela, El verano del Ubume, primera entrada de su serie Kyogokudo. El sorprendente éxito de la obra permitió a Kyogoku a dedicarse a tiempo completo a la escritura y convertir El verano de la ubume en la primera de la serie de aventuras de Kyogokudo, que en 2014 ya contaba con nueve novelas y cinco colecciones de relatos. Kosetsu hyaku monogatari (Cien historias que se rumorean), otra serie muy popular del autor, sigue las peripecias de un grupo de pequeños delincuentes urbanos en el Edo (actual Tokyo) de la era Tenpo (1830-1844) y sus encuentros con todo tipo de experiencias sobrenaturales.

Además de por su extraordinario grosor (en Japón no son tan comunes las novelas que se acercan al millar de páginas, como las suyas), los libros de Kyogoku se conocen por su cuidado diseño, que el autor supervisa hasta el más mínimo detalle de maquetación.

Kyogoku con vestimenta tradicional.

Keigo Higashino es un ingeniero y escritor, conocido principalmente por sus novelas de misterio. Es uno de los autores de misterio con más éxito en Japón, cuya obra ha vendido más de cinco millones de ejemplares. En junio de 2009 fue elegido presidente de Escritores de Misterio de Japón. Nacido en Osaka, comenzó a escribir novelas durante su vida profesional cuando era ingeniero en la compañía Nippon Denso Co. (actualmente DENSO). Ganó en 1985 el Premio Edogawa Rampo, que se otorga anualmente al mejor trabajo de misterio no publicado, por la novela Hokago cuando tenía sólo 27 años. Posteriormente, dejó su trabajo y comenzó una carrera como escritor en Tokio. En 1999, ganó el Premio Escritores de Misterio de Japón por la novela Naoko. En 2006, ganó el 134° Premio Naoki por «La devoción del sospechoso X». Sus novelas habían sido nominadas cinco veces antes de ganar dicho premio. La novela también ganó el sexto Gran Premio de Misterio Honkaku y se ubicó como el nuevo número uno, en 2006, en las listas Kono Mystery ga Sugoi! y Honkaku Best Mystery 10. Su obra a tenido adaptaciones para cine y televisión. La serie del Detective Galileo y la serie de Kyoichiro Kaga así como cuentos forman su producción.

Ryu Murakami es escritor y director de cine, nacido en Sasebo (Nagasaki) el 19 de febrero de 1952. Su nombre verdadero es Murakami Ryunosuke. Debido a la coincidencia de apellidos con Haruki Murakami, en los ochenta sería frecuente que se hablara de los "dos Murakamis", aunque en realidad no son parientes ni comparten mucho en términos literarios. Sus novelas suelen caracterizarse por la crudeza en las descripciones y la violencia de las situaciones narradas. El hecho de haber vivido cerca de una base militar estadounidense en su Sasebo natal le permitió conocer en profundidad la cultura e idiosincrasia norteamericana. Sus obras más conocidas son Azul casi transparente, de la que Murakami dirigió su adaptación cinematográfica, Sopa de Miso y Piercing.

Azul casi transparente es la obra que lo convirtió en bestseller al mostrar un grupo de jóvenes japoneses desilusionados que se autodestruyen en una espiral de drogas y rock. Escrita con 24 años le granjeó el elogio de la crítica especializada y, gracias a ella, obtuvo el premio Akutagawa. Posteriormente Murakami dirigiría una adaptación homónima al cine estrenada en 1979.

Natsuo Kirino comenzó su carrera en 1984 escribiendo novelas románticas. Sin embargo, este género de novelas no era popular en Japón, por lo que encontró muy difícil hacer de ellas su modus vivendi. De todos modos, no se sentía muy atraída a ese tipo de género y quiso concentrarse en la novela policíaca y de misterio, lo que empezó a hacer en la década de los 90's. Ha escrito considerables cantidades de novelas y cuentos y es considerada como una de las escritoras japonesas más populares. Es famosa principalmente por su novela Out, la cual recibió el "Premio escritores de misterio de Japón", el premio más alto de Japón en lo que literatura de misterio respecta, y fue nominada en 2004 para el Premio Edgar, en Estados Unidos. Otro de sus premios destacados es el premio Naoki, el cual ganó por su novela Yawarakana hoho (Mejillas suaves). Tres de sus novelas (Out, Grotesco y Crónicas de una diosa; esta última parte del proyecto Canongate Myth Series) fueron traducidas al español. Mientras que 4 de ellas (Real World, además de las nombradas anteriormente) fueron traducidas al inglés, siendo Out la primera en ambos idiomas.

Hablamos del proyecto Canongate Myth Series en la cuarta página del monografico que nuestra bibliotecaria dedica a la novela corta.

Fuminori Nakamura (1977) es una de las figuras más interesantes del panorama literario nipón actual. Se consagró en 2002 como uno de los jóvenes talentos literarios de Japón con su primera novela, Ju (La pistola), que ganó el Premio Shincho de Autor Novel. Dos años después recibió el Premio Noma para Jóvenes Escritores por Shako (La Sombra). En 2005 fue el ganador del Premio Akutagawa con "Tsuchi no naka no kodomo" y con "Suri" obtuvo el Premio Kenzaburo Oe en 2010.

Antes de dedicarse a la escritura Hideo Yokoyama trabajó durante 12 años como reportero de investigación en un periódico de su ciudad natal. Yokoyama debutó en el panorama literario en 1998 con una colección de historias policiacas que le valieron el Premio Matsumoto Seicho, además de la nominación al Premio Naoki. A partir de ese momento, las obras de Yokoyama fueron aclamadas tanto por el público como por la crítica, convirtiéndole en uno de los autores superventas de Japón. Tras siete años sin publicar ninguna novela, en 2012 salió a la luz 64 Rokuyon, que sería la primera obra suya en traducirse al castellano bajo el título Seis cuatro (2021) y que ya se reseñó en su momento en este monográfico.

Shusaku Endo fue un reconocido escritor japonés del Siglo XX que escribió con la singular perspectiva de ser japonés y católico, en un país donde la población cristiana es menor al 2%. Junto con Junnosuke Yoshiyuki, Shotaro Yasuoka, Junzo Shono, Hiroyuki Agawa, Ayako Sono y Shumon Miura, Endo está incluido en la "Tercera Generación", considerado el tercer grupo destacado de escritores después de la Segunda Guerra Mundial. En Escándalo cuenta la historia de un reconocido y premiado escritor de novelas japonés que mantiene una tranquila vida marital y social bajo el amparo del catolicismo. Pero su encuentro con una mujer pintora al final de una premiación pone en peligro su vida pública y la consciencia sobre sí mismo y sus creencias morales. La mujer afirma que lo conoce como cliente del barrio rojo de Kabukicho, en Tokio. Investigando, se adentra en las facetas más oscuras del ser humano, como el gusto por la agresión y la autodestrucción, hasta conocer lo que convive secretamente con él. Ayuda a reflexionar sobre los monstruos interiores e instintos primarios y la hipocresía que obstruyen el camino de la santidad.

Pásate por Intro >> Resumen temático.

Seishi Yokomizo fue un famoso escritor de novelas detectivescas y de misterio que vivió uno de los periodos más interesantes de Japón (la época antes a la II.G.M. y la posterior). Uno de sus libros más populares es “El clan Inugami” . En él aparece su emblemático personaje, el detective Kindaichi, una especie de Sherlock Holmes japonés. Es impresionante la influencia de Conan Doyle en toda la literatura, no sólo japonesa, de detectives.

Su tumba se encuentra en el cementerio Seishun-en de Kawasaki (Kanagawa). El premio Yokomizo Seishi, como su nombre indica, es un galardón en honor de tan señero escritor y está dotado con un importe de diez mil yenes, se concede a la mejor novela de misterio. Muchas de sus obras se han llevado al cine. Se le considera el escritor de novelas de misterio más famoso de Japón. El estreno en el cine de “El clan Inugami” en 2006 fue uno de los más exitosos que se recuerdan.

Cultivó el género de la novela policíaca histórica con obras de gran éxito entre el público lector publicadas con frecuencia por entregas. Su Kosuke Kindaichi, un detective privado algo sui generis, es uno de los personajes más populares de Japón. En la segunda mitad de los años 1970, hubo una exitosa segunda oleada de películas, dirigidas por Kon Ichikawa y con Koji Ishizaka interpretando a Kindaichi. Hubo también películas con actores protagonistas distintos, películas que es de suponer que provenían de estudios rivales, de modo similar a lo que ocurrió con las películas de James Bond, algunas protagonizadas por Sean Connery, y otras por Roger Moore.

Kosuke Kindaichi es el detective más famoso de Japón. Kindaichi recibe un nuevo caso para descubrir quién decapitó una valiosa estatua y se llevó la cabeza.

Kotaro Isaka es autor superventas y ganador de múltiples premios en su país, entre otros, el Shincho Mystery Club, el Mystery Writers of Japan y el Japan Booksellers' Award, es un referente dentro de la novela negra y ficción contemporánea japonesa. Tren Bala, su debut internacional, ha sido traducido a más de dieciocho idiomas y Bullet Train, su adaptación a la gran pantalla con Brad Pitt como protagonista, un gran éxito de taquilla. Tres Asesinos es otra opción disponible en español.

Cerramos este interesante capítulo. Japón y África resultan sorprendentes.

Solo queda agradecer a Arantxa Rufo por su aportación. Que mejor que una experta para aprender.

Podeis conocerla en Intro >> Resumen temático.

7-Diciembre-2023

Acaba a ver la luz la edición de Toronto, de Felip Bens, en castellano, que en los próximos días llegará a las librerías y se presentará el día 14 de diciembre, a las 19:30 horas, en El Imperio de Russafa. La novela vuelve a seguir las andanzas del detective Larry Forlati, “el hombre que quería ser Marlowe”, que forma parte de una familia mafiosa de origen siciliano y es miembro también, de pleno derecho, de la literatura valenciana contemporánea.

En El caso Forlati, Felip Bens ya narraba cómo Larry, al llegar a Valencia desde Londres, donde se crió desde los dos años, descubría a qué se dedicaba su familia, establecida en Valencia tres generaciones atrás. Esa primera novela cuenta la historia de la saga y revela por qué los Forlati llegan a los albores del siglo XXI convertidos en una poderosísima familia. La llegada de Larry, sin embargo, y los constantes encontronazos con su primo Junior, actual capo, acabará descabezando el negocio, al tiempo que fallece Don Gino, jefe en la sombra. Todos culparán a Larry de la situación y no le quedará otra que escapar, con la ayuda de un inspector de policía y, aunque él no lo sabe, de Amadeo Cantavieja, el consigliere que ha servido a los tres capos Forlati y que, con el encarcelamiento de Junior, queda al frente de la familia. Valencia, además de por todas sus aventuras y desventuras, ha sido decisiva para Larry: ha conocido a toda su familia y se ha enamorado perdidamente de Violinda, la esposa de su primo.

La nueva situación, con Larry huido, se despliega en Toronto. El exilio de Larry Forlati, novela que se lee de forma completamente autónoma. El detective se muda con una identidad secreta al Canadá, donde tratará de rehacer su vida. Mientras tanto, en Valencia, Junior planea la venganza desde la celda de su prisión y Amadeo Cantavieja se esfuerza por salvar el patrimonio de la familia y por proteger a Larry en la distancia. Cuando parece que la vida junto al lado del lago Ontario es plácida y que todo está saliendo a pedir de boca, tres acontecimientos volverán a poner a Larry contra las cuerdas: su primo se convierte en una amenaza mucho más real, de forma inesperada; irrumpe en Toronto un tío de la rama siciliana de la familia que conoce su verdadera identidad, y, además, Larry regresa a la actividad detectivesca con un caso en la parte mexicana de la frontera con Estados Unidos que le traerá muchos quebraderos de cabeza. Las cosas se complican sobremanera hasta que finalmente estalla la situación.

Si los miles de lectores de El caso Forlati disfrutaron de una novela trepidante y bien tramada, con unos personajes fascinantes, en Toronto, Felip Bens redobla su apuesta. En la ciudad canadiense, Larry Forlati conoce a la librera Renata, que le hará olvidar a Violinda por momentos, y que le permite vivir, por primera vez en su vida, algo parecido a la felicidad, pese a poner en jaque sus principios. La historia transcurre en Toronto, pero, puntualmente, se traslada a Washington, donde vive su tío Albano, o a Ciudad Juárez, donde se infiltrará en un cártel. También a Valencia, donde los Forlati intentan sobreponerse a una lenta decadencia, o a Barcelona, donde se ha marchado Violinda con su hija. Incluso a Sicilia, donde el viejo don Amadeo viaja para pedir ayuda a los Forlati de allá. Como ya sucedió en El caso Forlati, la ciudad (las ciudades, en realidad: Toronto, Ciudad Juárez, Washington, Barcelona, Palermo, Valencia) se convertirá en protagonista secundario de lujo en la novela, algo ya característico de la prosa de Bens, que suma a la trama narrativa y a un perfil de personajes muy bien elaborado, un poderoso contexto urbano.

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