Midnight Express (en España, El expreso de
medianoche; en México, Expreso de medianoche) es una película
estadounidense de 1978 basada en la novela autobiográfica
del mismo nombre. Fue dirigida por Alan Parker y contó con
Brad Davis e Irene Miracle como actores principales. El
guion es obra del luego famoso director Oliver Stone. El
filme está basado en un hecho biográfico real ocurrido en
1970: la historia de Billy Hayes, un joven estadounidense
que fue detenido por posesión de hachís en el aeropuerto
de Estambul (Turquía) y fue condenado a 30 años de prisión
por tráfico de drogas. Fue sometido a vejaciones en un ambiente
infrahumano y logró escapar a Grecia, donde fue detenido
y deportado a los Estados Unidos. Billy escribió el libro
homónimo en que se basa el filme.
El expreso de medianoche hace referencia a
un tren que salía cada noche desde Estambul hasta Edirne
(Turquía) con un tramo por territorio griego en el que los
narcotraficantes aprovechaban para saltar desde el tren
y no ser detenidos. Este era el plan inicial de Billy Hayes
pero no lo consiguió y fue encarcelado.
“Midnight Express” es el nombre de la autobiografía
de Billy Hayes, publicada por él mismo en 1977 con la ayuda
del escritor William Hoffer. Este libro le sirvió de inspiración
al director Alan Parker para trasladar esa historia al cine
un año más tarde. En la película se muestra el día a día
de Billy Hayes en una cárcel turca hasta que logra escapar
de allí tras varios intentos frustrados.
En 1970, Billy Hayes (Brad Davis), un joven
estadounidense, es sorprendido en el aeropuerto de Estambul
al tratar de abandonar el país con hachís adherido a su
cuerpo. Para su desgracia, el Gobierno turco desea dar un
castigo ejemplar a los traficantes de drogas y Billy es
juzgado por posesión de drogas y condenado a cuatro años
y dos meses, que deberá cumplir en una prisión de Estambul.
Su padre (Mike Kellin) viaja a Turquía para gestionar su
liberación, pero la embajada estadounidense nada puede hacer,
ya que el presidente Nixon había tensado las relaciones
con Turquía. Comienza entonces una pesadilla para el joven,
que deberá adaptarse al ambiente de miseria dantesca de
la prisión. Queda junto a tres presos extranjeros: Erich
(Norbert Weisser), Jimmy (Randy Quaid) y Max (John Hurt),
quienes también deben cumplir largas condenas. Un condenado
turco, Rifki (Paolo Bonacelli) los provee y vigila, por
encargo del jefe de la prisión, Hamidou (Paul L. Smith),
un gendarme sádico y pervertido que abusa de los reclusos.
Entonces el padre de Billy decide contratar a un abogado
turco, Yesil (Franco Diogene), que deberá enfrentarse a
la complicada burocracia legal turca.
En 1974, las apelaciones del abogado fracasan,
al recibir Billy una condena de 30 años, esta vez bajo el
cargo de contrabando de drogas, condena emitida por el Tribunal
Supremo de Ankara. Billy ve su futuro destruido y comienza
a caer en un estado de desequilibrio mental que lo lleva
a agredir a Rifki, por lo que es trasladado a la sección
psiquiátrica de la prisión. La novia de Billy, Susan (Irene
Miracle), lo visita en 1975 en la prisión y consigue entregarle
dinero oculto en un álbum de fotos, para intentar la fuga.
Billy pide hablar con el jefe Hamidou, le ofrece dinero
para que lo lleve al hospital del penal, y este lo lleva
a una habitación, lo golpea e intenta violarlo. Billy, en
su desesperación, logra empujar al gendarme y este muere
cuando un colgador de la pared se le clava en la nuca. Acto
seguido, Billy se viste con un uniforme de guardia, intenta
la fuga y consigue huir.
Pasados los años, llegó a afirmar que la película
contenía algún tipo de exageración: en el filme se muestra
cómo tiene que matar a un guardia para escapar de la cárcel
y tal hecho no sucedió en la vida real, sino que huyó cuando
se le trasladaba a otra cárcel. Como la película no se pudo
rodar en Turquía, se utilizó el Fuerte San Elmo, ubicado
en Malta, para llevar a cabo todas las escenas carcelarias.
De Turquía tan solo aparecen unas imágenes panorámicas en
los primeros minutos de metraje.
La película supuso un antes y un después en
la trayectoria de su director, Alan Parker. Era su segundo
filme después de debutar con Bugsy Malone, el nieto de Al
Capone (1976), y se puede afirmar que fue su primer éxito:
estuvo nominado a Mejor director en los premios Oscar y
la cinta obtuvo el premio a Mejor película en los Globos
de Oro de 1978, en los que también estaba él nominado como
Mejor director. Se puede considerar, sin ninguna duda, que
El expreso de medianoche es uno de sus grandes títulos,
y en él Alan Parker, a pesar de que aún tenía escasa experiencia
como director, consiguió crear un ambiente lleno de opresión
y tensión.
Un clima desasosegante que impregna la película
desde las primeras escenas donde se ve al protagonista de
la historia, interpretado por Brad Davis, en el aeropuerto
temeroso porque la policía no lo detenga, hasta en las escenas
más duras de la cárcel. Alan Parker creó, junto con el guionista
Oliver Stone (que ganó el premio Oscar a Mejor guion adaptado),
una película con una gran carga dramática en un ambiente
lleno de violencia, miedo e incertidumbre. Su protagonista,
Brad Davis, es la pieza principal de todo el largometraje
y será muy difícil que el espectador pueda olvidar el rostro
de este joven. Brad Davis era hasta ese momento un rostro
desconocido para el gran público. Con El expreso de medianoche
todo cambió: obtuvo el premio Nueva estrella del año en
los Globos de Oro de 1978 en el que también fue candidato
a Mejor actor. Y es que Brad Davis consigue crear, dentro
de un ambiente deshumanizado y lleno de horror, un personaje
que circula entre la rabia y el deseo por de escapar, una
simbiosis muy bien reflejada en todas las escenas carcelarias
donde los roles de los personajes, sobre todo el del protagonista,
varían hasta convertirse en personas con una moral cuestionable.
Se trata de mostrar cómo el ambiente de una
cárcel puede sacar lo peor de uno mismo. Fue tal la popularidad
que supuso para Brad Davis protagonizar el filme de Alan
Parker que, desgraciadamente, estuvo encasillado en el mismo
papel llegando a caer en el olvido. El actor no pudo asentarse
dentro de la cinematografía estadounidense, y sufrió una
muerte prematura a principios de la década de los 90 víctima
del SIDA. Fue el papel de su vida.
Uno de los elementos que enriquecen la tensión
de la película es la música de Giorgio Moroder, que consiguió
hacerse con la estatuilla de los Oscar en 1978 a la Mejor
banda sonora. Fue el propio Alan Parker el que escogió al
compositor para que creara la música de su filme, algo que
para el propio músico fue totalmente nuevo porque, acostumbrado
a componer para cantantes, fue su primera colaboración para
el cine. Y a la primera ¡un Oscar! Fue la primera vez que
una composición electrónica conseguía alzarse con tal premio.
Y esa es una de las características que convierten a esta
banda sonora en una de las más míticas dentro de la historia
del cine: se introdujo el sintetizador en la industria.
Giorgio Moroder también obtuvo otros premios como el Globo
de Oro o el de la Asociación de críticos de Los Ángeles
a la mejor banda sonora original.
La otra protagonista dentro del filme de
Alan Parker: la cárcel turca, donde el protagonista permanece
durante casi todo el metraje. El expreso de Medianoche refleja
la incertidumbre de no saber qué ocurrirá con el destino
de su protagonista, mostrando así sensaciones próximas a
la soledad y a la locura agravadas por la sensación de lejanía
de sus seres queridos: sus padres y su novia. Pese a la
cruda realidad que el personaje está viviendo, el director
(y su guionista Oliver Stone) aciertan en otorgarle, casi
en todo momento, pequeños ecos de esperanza al personaje.
Es decir, en ningún momento pierde la ilusión por escapar
de allí, aunque los hechos que se van sucediendo provoquen
en el personaje cambios de ánimo muy bruscos. Asistimos,
así, a variaciones en el rol del protagonista: de un ser
inocente a un hombre lleno de odio que desea escapar de
allí como sea. A pesar de estar ambientada en una prisión,
la película plantea un relato individual siendo los demás
personajes meros acompañamientos de la trama principal:
la locura y desesperación de Billy Hayes.
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